Hola ¿qué tal va la semana? Nosotros por aquí estamos bien pero hemos tenido fuertes vientos estos días atrás, e incluso se han llegado a suspender las clases en los colegios por precaución, así que las peques y yo hemos estado en casa. Pasados esos días tan ventosos hemos vuelto a la normalidad y al colegio (en el post anterior os cuento un poco sobre mis clases)😉
Hoy os quiero contar un poquito sobre mí y cuándo y cómo empece esta aventura de crear un blog. Así que allá vamos:
Todo empezó hace casi diez años cuando vivía en Madrid y nació mi primera hija. Yo soy de Alicante, pero unos años antes me había mudado a Madrid. Durante todo ese tiempo viviendo en Madrid yo estaba muy a gusto, integrada (y eso que a mi siempre me han tachado de ser muy casera y enmadrada), tenía amistades, era independiente... Pero cuando nació mi hija me di cuenta de que no tenía a mi familia cerca para ayudarme si en algún momento necesitaba algo y me sentí un poco sola.
Yo era una mamá primeriza, con un bebé con cólico del lactante y eso me hacía sufrir, verla retorciéndose de dolor me hacía pasarlo realmente mal. A todo esto había que añadirle que mi marido por su trabajo viajaba bastante, y los viajes no eran cerca, vamos que se iba fuera de España. Así que, intentando no sentirme tan sola y el afán de aprender cosas sobre maternidad, encontré un blog que me ayudó, donde la mamá que escribía en él tenía los mismos miedos, dudas e inquietudes que yo en aquel momento. En este blog recomendaban otros blogs y para cuando me di cuenta estaba siguiendo un par de blogs sobre maternidad.
A mí siempre me ha gustado escribir, de pequeña en una libreta escribía pequeños relatos, me imaginaba que era una escritora y plasmaba en ella muchos comienzos de novelas que nunca terminé ¡ya en aquella época no era muy constante en eso de escribir😉!
Así que, en ese momento en el que me encontraba, un poco sola, sin familia cerca y, viendo que podía escribir sobre lo que me estaba pasando, me animé a crear mi blog. No sabía si alguien alguna vez lo iba a leer, pero no me importaba, realmente quería escribir y expresar lo que sentía a modo de diario, como desahogo. Lo único que me importaba en ese momento (y que me sigue importando ahora) era que escribiendo me sentía mejor. Soy una persona a la que le gusta hablar, no soy muy reservada, mantengo mi intimidad pero hay muchas otras cosas que considero que se pueden contar y compartir, y que ese toma y daca ayuda a crecer a todos los niveles.
De esta forma, sin pensarlo, comencé a crear un blog. En ese momento los blogs que leía eran de Blogger (que es una aplicación web bastante sencilla de manejar) y vi que no necesitaba saber programar para crear mi blog. Me puse manos a la obra y empecé a darle forma al diseño y demás. El título del blog fue algo que tuve muy claro desde el principio, yo era una mamá y quería contar todo lo que me pasaba y así surgió "mamaysumundo", que era un título que encajaba perfectamente con lo que yo quería comunicar.
Así que, en ese momento en el que me encontraba, un poco sola, sin familia cerca y, viendo que podía escribir sobre lo que me estaba pasando, me animé a crear mi blog. No sabía si alguien alguna vez lo iba a leer, pero no me importaba, realmente quería escribir y expresar lo que sentía a modo de diario, como desahogo. Lo único que me importaba en ese momento (y que me sigue importando ahora) era que escribiendo me sentía mejor. Soy una persona a la que le gusta hablar, no soy muy reservada, mantengo mi intimidad pero hay muchas otras cosas que considero que se pueden contar y compartir, y que ese toma y daca ayuda a crecer a todos los niveles.
De esta forma, sin pensarlo, comencé a crear un blog. En ese momento los blogs que leía eran de Blogger (que es una aplicación web bastante sencilla de manejar) y vi que no necesitaba saber programar para crear mi blog. Me puse manos a la obra y empecé a darle forma al diseño y demás. El título del blog fue algo que tuve muy claro desde el principio, yo era una mamá y quería contar todo lo que me pasaba y así surgió "mamaysumundo", que era un título que encajaba perfectamente con lo que yo quería comunicar.
Mis primeros posts estaban muy enfocados en la maternidad, que es lo que era mi vida en ese momento: todo giraba alrededor de mi bebé y así lo dejé escrito en ese inicio del blog. Con el tiempo, fui contando otras cosas que me sucedían o compartía alguna que otra receta, ya que me encanta cocinar, pero el tema principal seguía siendo la maternidad. Poco a poco empezó a haber gente que leía mis entradas pero, aunque eso me gustaba, tener muchos lectores no era una prioridad para mí.
Cuando mi hija tenía un año y medio nos volvimos a Alicante, y una vez allí y con mi familia cerca, dejé de tener la necesidad de escribir, ya no me sentía tan sola ni tenía la necesidad de usar el blog para contar lo que me sucedía. Poco a poco fui dejando el blog a un lado, cada vez escribía menos hasta que un día dejé de hacerlo.
Pasarón años hasta que me animé a retomarlo, en ese momento tenía a mi segunda hija y estaba trabajando (por lo que mi tiempo libre era realmente escaso) pero aun así de vez en cuando publicaba algo porque me lo pedía el cuerpo. Es verdad que no era muy constante, pero si tenía algo que contar, cogía el ordenador y lo escribía.
En ese momento de mi vida me encontraba cuando empezaron los primeros rumores sobre venir a U.S.A, todos esos cambios que se avecindaban y todas esas emociones que sentía hicieron que siguiera escribiendo, tenía ganas de expresar y de dejar constancia de todo esos sentimientos que alborotaban mi mente.
Desde que retomé este ha ido evolucionando al igual que mi vida, él y yo hemos ido creciendo, y ahora en él cuento muchas más cosas que antes pero el eje principal sigue siendo mi mundo y todo lo que lo que le rodea.
Ahora ya sabéis un poquito más de mí 😉.
Espero que paséis un buen fin de semana, nosotros por aquí quizás vayamos a esquiar.
Cuando mi hija tenía un año y medio nos volvimos a Alicante, y una vez allí y con mi familia cerca, dejé de tener la necesidad de escribir, ya no me sentía tan sola ni tenía la necesidad de usar el blog para contar lo que me sucedía. Poco a poco fui dejando el blog a un lado, cada vez escribía menos hasta que un día dejé de hacerlo.
Pasarón años hasta que me animé a retomarlo, en ese momento tenía a mi segunda hija y estaba trabajando (por lo que mi tiempo libre era realmente escaso) pero aun así de vez en cuando publicaba algo porque me lo pedía el cuerpo. Es verdad que no era muy constante, pero si tenía algo que contar, cogía el ordenador y lo escribía.
En ese momento de mi vida me encontraba cuando empezaron los primeros rumores sobre venir a U.S.A, todos esos cambios que se avecindaban y todas esas emociones que sentía hicieron que siguiera escribiendo, tenía ganas de expresar y de dejar constancia de todo esos sentimientos que alborotaban mi mente.
Desde que retomé este ha ido evolucionando al igual que mi vida, él y yo hemos ido creciendo, y ahora en él cuento muchas más cosas que antes pero el eje principal sigue siendo mi mundo y todo lo que lo que le rodea.
Ahora ya sabéis un poquito más de mí 😉.
Espero que paséis un buen fin de semana, nosotros por aquí quizás vayamos a esquiar.
Comentarios
Publicar un comentario